jueves, 15 de noviembre de 2012

Mhatma Gandhi
Cuida tus pensamientos
porque se volverán palabras.
Cuida tus palabras
porque se transformarán en actos.
Cuida tus actos
porque se harán costumbre.
Cuida tus costumbres
porque forjarán tu carácter.
Cuida tu carácter
porque formará tu destino.
y tu destino, será tu vida.
Mahatma Gandh

lunes, 20 de agosto de 2012

Ellos venían desde lejos

  Si hubieran conocido la lengua de la ciudad, habrían podido preguntar quién hizo al hombre blanco, de dónde salió la fuerza de los automóviles, cómo se sostienen los aviones, por qué los dioses nos negaron el acero.
  Pero no conocían la lengua de la ciudad. Hablaban el viejo idioma de los antepasados, que no habían sido pastores ni habían vivido en las alturas de la sierra nevada de Santa Marta. Porque antes de los cuatro siglos de persecución y de despojo, los abuelos de los abuelos de los abuelos habían trabajado las tierras fértiles que los nietos de los nietos de los nietos no habían podido conocer ni siquiera de vista o de oídas.
  De modo que ahora ellos no podían hacer otro comentario que el que les nacía, en chispas burlonas, de los ojos: miraban esas manos pequeñitas de los hombres blancos, manos de lagartija, y pensaban: esas manos no saben cazar, y pensaban: sólo pueden regalar regalos hechos por otros.
  Estaban parados en una esquina de la capital, el jefe y, tres de sus hombres, sin miedo. No los sobresaltaba el vértigo del tráfico de las máquinas y los transeúntes, ni temían que los edificios gigantes pudieran desprenderse de las nubes y derrumbárseles encima. Acariciaban con la yema de los dedos sus collares de varias vueltas de dientes y semillas, y no se dejaban impresionar por el estrépito de las avenidas. Sus corazones se compadecían de los millones de ciudadanos que les pasaban por encima y por debajo, por los costados y por delante y por detrás, sobre piernas y sobre ruedas, a todo vapor: “¿Qué sería de todos ustedes –preguntaban lentamente sus corazones- si nosotros no hiciéramos salir el sol todos los días?”

miércoles, 1 de agosto de 2012

EARTH


No somos más que una gota de luz, una estrella fugaz, una chispa, tan sólo, en la edad del cielo.

viernes, 15 de junio de 2012


Tarta de dulce de leche y ganache de chocolate

Ingredientes

Para la masa
250 g de harina
200 g de manteca
30 g de azúcar impalpable

Para la ganache
200 g de crema de leche
200 g de chocolate amargo

Para el relleno
600 g de dulce de leche repostero

Preparación


  • Para la masa, en un bol cernir juntos la harina con el azúcar.
  • Hacer un hueco en el centro, volcar la manteca fría cortada en cubos y con la punta de los dedos desarmarla hasta conseguir un arenado con los secos.
  • Tomar el bollo tratando de tocar la masa lo menos posible y dejar reposar en heladera por al menos una hora.
  • Luego estirar, forrar una tartera desmontable de 26 cm, pinchar el fondo con un tenedor y cocinar la masa a blanco en horno precalentado moderado por 20 a 25 minutos.
  • Para la ganache, calentar la crema y antes de que hierva volcarla sobre el chocolate picado; dejar reposar; mezclar con batidor hasta que quede una pasta homogénea; y llevar a la heladera.
  • Para el armado final, untar la masa precocida con el dulce de leche haciendo una capa alta; esparcir por encima con espátula y muy delicadamente la ganache.
  • Llevar a la heladera por al menos 1 hora antes de servir.
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martes, 8 de mayo de 2012

LA CRISIS

No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo.
La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países porque la crisis trae progresos.
La creatividad nace de la angustia como el día nace de la noche oscura.
Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar ‘superado’.
Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones.
La verdadera crisis es la crisis de la incompetencia.
El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones.
Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos.
Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia.
Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo.
En vez de esto trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora que es la tragedia de no querer luchar por superarla.
ALBERT EINSTEIN